Investigaciones científicas nos demuestran la relación que existe entre el uso adecuado de audífonos medicados y el factor de riesgo de sufrir de demencia senil.
Ciertamente, un estudio documentó la conexión entre la pérdida auditiva y el deterioro cognitivo en un grupo de casi 4,000 mil voluntarios durante un largo proceso de 25 años. Los resultados que obtuvieron los investigadores fueron interesantes.
- Personas con pérdida auditiva que NO usan audífonos – Mayor riesgo de demencia y depresión.
- Personas con pérdida auditiva que SÍ usan audífonos – Menor riesgo de demencia y depresión, además, el proceso de deterioro cognitivo es igual al de una persona sin pérdida auditiva.
Los especialistas concluyeron que lo importante no está simplemente en la capacidad de escuchar mejor, sino en cómo una mejor audición permite desarrollar una mejor vida cotidiana. Con una mayor facilidad de comunicarse mejor y de forma eficiente gracias a los audífonos se asegura una mejor interacción social, además de estimular el estado de ánimo y brindar la oportunidad de participar activamente en la estimulación del cerebro para retrasar el deterioro cognitivo.