Los hongos en el oído, también conocida otomicosis u otitis del nadador, es una infección del conducto auditivo externo y la membrana timpánica causada por hongos. Esta condición es más común porque el oído está en constante contacto con el medio exterior.
Causa de los hongos en el oído
La principal causa de la otomicosis son los hongos, siendo los más comunes el Aspergillus niger y la Candida albicans. Estos hongos proliferan en entornos favorables, como heridas, exceso de calor o humedad. Si no se detiene a tiempo, este crecimiento puede causar molestias e infecciones. Todo esta recae un desempeño adecuado de nuestro sistema auditivo, que si no se tiene en cuenta estos cuidados, siempre es recomendable visitar a especialista para que evalue el daño y pueda iniciar el tratamiento adecuado.
Factores predisponentes
- Exceso de calor: Aunque es una condición poco frecuente, la presencia de hongos en el oído aumenta en verano o en zonas tropicales debido a la mayor exposición al calor.
- Exceso de humedad: Las actividades en piscinas, playas o lugares con climas húmedos aumentan la incidencia de otomicosis.
- Mala higiene: Usar soluciones jabonosas o gotas inapropiadas puede cambiar el pH de la piel y el uso de objetos en el conducto auditivo externo puede provocar infecciones.
- Uso inadecuado de dispositivos auditivos: El uso incorrecto de audífonos, tanto intracanales como retroauriculares, sin una limpieza adecuada, puede incrementar la humedad y la producción de cerumen, predisponiendo al oído a infecciones por hongos.
Síntomas
Si experimenta alguno de estos síntomas, consulte a un especialista para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuado:
- Picor y escozor en el canal auditivo.
- Dolor en el canal auditivo.
Protegerse de los hongos en el oído es esencial para mantener una buena salud auditiva. Adopte medidas preventivas adecuadas y consulte a un especialista si presenta síntomas.